El costo de la unidad
Ana Harper
Puedes considerar en tu clase el valor de la unidad a través de la pregunta:
¿Por qué es importante la unidad?
Posibles respuestas:
· Hace fuerte cualquier circunstancia (Ecl 4:9) mejores son dos que uno….
· Importancia en el hogar; es la base de la sociedad (Gén 2:24) se unirá a su mujer y serán una sola carne.
· Es parte del plan divino, ya que fue una circunstancia muy favorable para el derramamiento del Espíritu Santo (Hech. 1 y 2) estaban juntos, unánimes, etc.
· Jesús manifiesta su deseo de unidad y la necesidad de ésta para sus discípulos en la oración de intercesión registrada en Juan 17:11, 21-23.
· Es un estado de perfección (Efe 4:13). Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe….
· Es una de las evidencias más contundentes de que Cristo está morando en esa comunidad.
Podríamos tener estas respuestas y algunas más, las cuales pueden ser analizadas y valoradas en su momento. Podemos concluir esta actividad con la idea de que si tan solo consideramos qué es la voluntad divina, expresada por nuestro Señor Jesucristo en su oración antes de ascender al calvario, essuficiente razón para que su iglesia de todos los tiempos vele cuidadosamente para mantener la unidad.
La iglesia primitiva modelo de unidad
Hechos 2:42–47: estos textos hacen una breve descripción de una comunidad modelo que sin duda fue la manifestación práctica de la voluntad de Dios, expresada siglos antes a través del Salmo 133:1. "¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía!".
El programa evangelístico de la iglesia primitiva no estuvo ajeno al plan satánico de desvirtuar todo proyecto divino. Al analizar esta circunstancia en la iglesia de Galacia, desde la perspectiva del "Gran conflicto", nos confirma que "hay un enemigo que ha hecho esto" (Mat. 13:28). A la vez que nos advierte que será la misma obra maléfica para la iglesia de todos los tiempos.
Tenemos suficiente luz y acceso al Poder Divino como para permitir dejarnos vencer por circunstancias y ataques como éste; la invitación es que velemos en oración (Luc. 21:36). "Velad, pues, en todo tiempo, orando para ser tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre". Esta forma de vivir podrá conformarnos en una unidad que va más allá de compartir la vida cotidiana, llega hasta mantener claro el mismo Evangelio, que es la oración apostólica expresada en el texto central de este estudio.
"Os ruego hermanos, por el nombre de nuestro Seños Jesucristo, que habléis todos una misma cosa y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma carne y en un mismo parecer" 1 Cor. 1:10