La participación de los alumnos en el repaso semanal del Estudio de la Biblia en la Escuela Sabática
Ismael Castillo
La participación de los alumnos en el "repaso de la lección" siempre ha sido un desafío, especialmente cuando todas las clases se quedan dentro de la nave principal de la iglesia. Allí las clases se extienden a lo largo de las bancas y una clase generalmente abarca dos y tres bancas. Esta circunstancia genera un problema de comunicación porque es muy difícil que los comentarios de un extremo de la clase se escuchen en el otro sin perturbar a la clase que está enseguida.
Así que te compartiré una estrategia que busca obtener una mayor participación en un ambiente que no es muy apropiado para esos propósitos.
En primer lugar, para la hora del repaso forma pequeños grupos de cuatro personas. Trata de que cada semana los grupos se formen con diferentes miembros de la clase, de esta manera lograrás que las relaciones se extiendan y se integren.
En segundo lugar, pide a todos que en esos grupos pequeños lean el contenido de los pasajes de estudio de la semana. Esto permitirá un nuevo acercamiento al texto bíblico. Les pides que descubran o identifiquen el aporte específico que cada texto hace al tema de la lección de esa semana. Invítalos a elaborar una cadena con los textos para descubrir la forma en que el tema se va "desgranando". Cada uno de los miembros de la clase tendrá la oportunidad de hacer sus comentarios. Como el grupo es pequeño, no tendrán que hablar en voz alta, y mediante estos grupos tendrás una clase muy participativa.
Otra variante para el trabajo en equipo es entregarles los conceptos más importante de la semana para que cada quien aporte sus comentarios y el grupo se enriquezca.
Ya sea que se comenten los textos o los conceptos, les podrás dar un tiempo aproximado de 20 minutos para los comentarios en cada grupo. Después podrás usar 10 minutos para que un representante de cada grupo comparta la síntesis de los comentarios de su grupo.
Al final, tendrás oportunidad de hacer un resumen, afirmando los puntos principales, haciendo aplicaciones puntuales y presentando una introducción del estudio de la siguiente semana.
Toma en cuenta los siguientes puntos:
1. Formación de grupos más pequeños (4).
2. Formación de los grupos con diferentes personas cada vez.
3. Comentarios en los grupos del contenido bíblico y su relación con el tema de la lección, o comentarios de los conceptos más importantes y su relación con el contenido bíblico.
4. Comentarios puntuales de un representante de cada grupo para beneficio de toda la clase.
5. Resumen y aplicaciones por parte del maestro.
Lo importante es la participación en grupos pequeños. Allí, en el grupo hay lugar para lecturas, preguntas, comentarios, testimonios, oración y compañerismo. Incluso será bueno que el maestro se una a un grupo cada semana, así tendrá oportunidad de escuchar los aportes y las preocupaciones de los miembros de su clase. Conocerá más de cerca el pensamiento de ellos y tendrá más puntería para compartir al final las aplicaciones.
Muchas veces damos la impresión que queremos que los comentarios sean más públicos, pero esos no son los que enriquecen al grupo. Tampoco lo enriquece el debate en controversias con las diferencias de opinión. Muchas veces dos personas se enfrascan en argumentaciones con solo son interesantes para ellos, mientras el resto de los miembros de la clase pierde el interés en el tema.
Lo que lo enriquece es el intercambio, la interacción, por eso la importancia de la conversación en voz baja en los grupos más pequeños.
"En la escuela sabática deberían enseñarse lecciones que arrojen luz en las cámaras del corazón y de la mente."Consejos sobre la obra de la Escuela Sabática, página 130.