"Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de jehová nuestro Hacedor. Porque él es nuestro Dios; nosotros el pueblo de su prado, y ovejas de su mano" (Salmos 95:6,7).

EL SÁBADO Y LA ADORACIÓN

sábado 9 de julio, 2011

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Exodo 20:11; Deuteronomio 5:15; Isaias 44:15-20; Mateo 11:28-30; Romanos 6:16-23.

LA CREACIÓN Y LA REDENCIÓN son centrales en el mensaje del primer ángel y la adoración. El primer ángel tiene el "evangelio eterno", las buenas nuevas de la salvación en Jesús, que incluye el perdón del pecado y el poder sobre él. El evangelio nos proete una vida nueva en Cristo y la santificación, que es parte del proceso de salvación y redención (Juan 17:17; Hechos 20:32; 1 Tesalonicenses 5:23).

El mensaje del primer ángel nos recuerda a quién debemos adorar: a nuestro Creador, quien nos hizo con el mundo en que vivimos.

Así, vinculados a la adoración están los temas de la creación, la redención y la santificación. Nos sorprende que estos tres temas estén revelados en el sábado, un elemento descrito en Apocalipsis 14. Preguntémonos: ¿Adoramos al Creador, Redentor y Santificador o a la bestia y a su imagen? No hay una tercera opción.

Esta semana consideraremos el mandamiento del sábado y cómo se revelan estos temas en él. Al estudiarlo, pregúntate cómo hacer de estos temas el centro de nuestra experiencia de adoración.