"Cantad a Jehová cántico nuevo; cantad a Jehová, toda la tierra" (Salmos 96:1).

La adoración, el canto y la alabanza

sábado 30 de julio, 2011

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: 1 Crónicas 16:8-36; Salmos 32:1-5; 51:1-6, 17; Filipenses 4:8; Apocalipsis 4:9-11; 5:9-13.

LA VIDA DEL REY DAVID está en la Biblia por muchas razones: no solo porque una parte importante de la historia de Israel se centra alrededor de su vida y de su reinado; también podemos aprender muchas lecciones espirituales de él, tanto de sus obras buenas como de las malas.

Esta semana comenzaremos con algunos ejemplos de David y de su vida para entrar más en el tema de la adoración: qué significa, cómo deberíamos hacerla y lo que ella debe hacer por nosotros. Porque, en David, podemos ver muchos ejemplos de adoración, cantos y alabanzas. Estos elementos fueron una parte vital de su vida y de su experiencia con Dios.

Esto también debe suceder con nosotros, especialmente si recordamos que el mensaje del primer ángel es un llamado a la adoración. ¿Qué significa "adorar"? ¿Cómo lo hacemos? ¿Qué papel desempeña la música en la adoración? ¿Qué distingue la verdadera adoración de la falsa adoración?

Estos son temas que tocaremos este trimestre al prestar atención al llamado "Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor. Porque él es nuestro Dios; nosotros el pueblo de su prado, y ovejas de su mano" (Salmos 95:6, 7).