"Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros, es libre" (Gálatas 4:26)

EL PACTO CON ABRAM

lunes 28 de noviembre, 2011

¿Qué promesas hizo Dios a Abram en Génesis 12:1 al 5? ¿Cuál fue la respuesta de Abram?

Las promesas dadas a Abram son uno de los pasajes más poderosos del Antiguo Testamento. Todas hablan de la gracia de Dios. Las promesas las hizo Dios, no Abram. Él no hizo nada para merecer el favor de Dios, ni hay indicios de que Dios y Abram llegaran juntos a este acuerdo. Dios hizo todas las promesas. Pero Abram es llamado a tener fe en ellas, no una "fe" débil, sino la fe que se manifestó al dejar a su familia (a los 65 años) y salir a la tierra que Dios le había prometido.

"Con la ‘bendición' pronunciada sobre Abram y, por su medio, a toda la humanidad, el Creador renovó su propósito redentor. Él había ‘bendecido' a Adán y a Eva en el Paraíso (Génesis 1:28; 5:2), y luego ‘bendijo a Noé y a sus hijos' después del Diluvio (9:1). Así, Dios hizo claras sus promesas anteriores de un Redentor que rescataría a la humanidad, destruiría el mal, y restauraría el Paraíso (Génesis 3:15)" (LaRondelle, ibíd., pp. 22, 23).

Después de diez años de esperar al hijo prometido, ¿qué dudas tuvo Abram? Génesis 15:1-6.

A veces vemos a Abram como el hombre de fe que nunca tuvo dudas o preguntas. Pero las Escrituras presentan un cuadro diferente. Abram creyó, pero también tuvo preguntas por el camino. Su fe fue creciendo. Como el padre del relato de Marcos 9:24, Abram le dijo a Dios: "Creo, ayuda mi incredulidad" (Génesis 15:8). Como respuesta, Dios le dio la certeza de su promesa al entrar en un pacto con él (Génesis 15:7-18). Esto sorprende no solo porque Dios hace un pacto con Abram, sino también por la condescendencia de Dios para hacerlo. Los gobernantes, en el antiguo Cercano Oriente, esquivaban la idea de hacer promesas a sus siervos; pero Dios no solo dio su palabra, sino también, al pasar simbólicamente por entre los trozos del animal sacrificado, comprometía su vida en ello: Jesús dio su vida en el Calvario para que esta promesa fuera una realidad.

¿En qué áreas has ejercido tu fe y creído en lo que parecía imposible? ¿Cómo puedes seguir aferrándote a ella, no importa qué ocurra?