“Si me amáis, guardad mis mandamientos” (Juan 14:15).    

UNA RESPUESTA DE AMOR

sábado 2 de junio, 2012

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: 1 Juan 4:18, 19; Romanos 3:19, 20; Juan 15:13; Romanos 5:6-8; Juan 6:28, 29.

PENSAMIENTO CLAVE: Debemos ganar almas para Cristo; la pregunta es: ¿Qué nos motiva a hacer precisamente eso?

AUNQUE A MENUDO SE CONSIDERA que nuestro texto para memorizar se refiere a los Diez Mandamientos, también hay otros mandamientos, entre los cuales está: "Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones" (Mateo 28:19).

Nuestra motivación para testificar y evangelizar debería ser la gracia de Dios hacia nosotros, y no un sentimiento de culpa, de obligación, o de deuda. No necesitamos ser psicólogos de la conducta para saber que mucho de lo que hacemos es una respuesta a algo. Esto también será cierto de nuestra participación en la testificación y la evangelización. Podemos descubrir nuestra motivación preguntándonos por qué hacemos lo que hacemos. ¿Por qué participamos en la testificación y la evangelización? O, ¿por qué no lo hacemos?

Analizaremos la motivación correcta para involucrarnos en la obra del Señor, y también los peligros de trabajar con motivaciones equivocadas, tales como la obligación, la culpa o la vergüenza. Veremos por qué la evangelización y la testificación deberían ser nuestra respuesta de amor al don de la salvación que Dios nos ha dado.