“En esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos. El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él” (1 Juan 2:3, 4).
LA LEYES Y LAS REGLAS DE DIOS
La palabra torá es un término hebreo muy usado en el Antiguo Testamento y, a menudo, se traduce como ley. El Nuevo Testamento usa la palabra griega nómos (ley), para traducir torá. Torá significa “orientación”, o “guía”. Siendo que la Biblia es un registro de la relación de Dios con los humanos, en la Biblia, en general, “ley”, se refiere a todas las instrucciones de Dios a su pueblo. Como Dios mismo es bueno y recto, y guía e instruye a su pueblo en bondad y rectitud, entonces su Ley revela su bondad y su rectitud. O, como decimos, la Ley es un reflejo del carácter de Dios.
¿Qué nos dicen los siguientes textos acerca de la Ley y, en última instancia, acerca de Dios? Salmo 19:7, 8; Romanos 7:12; Salmo 119:151, 152, 172.
Por medio de la Biblia, Dios se ha revelado a la humanidad. Al leer el texto sagrado, uno encuentra mucho material referente a orientaciones e instrucciones que cubren muchos aspectos de la vida humana: moralidad, ética, salud, sexualidad, dieta, trabajo, etc. Algunas de estas instrucciones son universales; otras son más limitadas en el tiempo y en su amplitud. Pero como todas ellas son instrucciones de Dios (torá), se necesita mucho cuidado para comprender qué es universal y qué es limitado. Los adventistas y otros grupos cristianos generalmente distinguen entre las leyes “ceremoniales” (reglas que enseñan el plan de salvación mediante símbolos y prácticas rituales), leyes “civiles” (instrucciones con respecto a la vida comunitaria del antiguo Israel) y leyes “morales” (instrucciones de conducta para la humanidad).
El libro de Levítico contiene leyes ceremoniales, con respecto al servicio del Santuario y su sistema ritual. Las leyes civiles y el principio de justicia que está detrás de ellas puede verse, por ejemplo, en Éxodo 23:1-9. Y luego tenemos la Ley moral, los Diez Mandamientos, que la mayoría de los cristianos (por lo menos, en teoría) cree que todavía son la Ley de Dios para la humanidad.
Considera Éxodo 23:1-9. ¿Qué principios morales universales obtenemos de lo que fue dado específicamente al antiguo Israel?