Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro

(Isa. 45:18)

SEA LA LUZ

lunes 7 de enero, 2013

"Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día" (Gén. 1:3-5). ¿Qué enseñan estos versículos acerca del primer día de la creación?

Varias cosas se pueden deducir de este pasaje.

  • Primero, la luz apareció en respuesta a la orden de Dios. La palabra de Dios es efectiva.
  • Segundo, la luz era "buena". El texto dice que Dios "vio" la luz; ¿hay alguna duda de que Dios ve todas las cosas? La luz que Dios hizo fue considerada buena a los ojos de Dios. Entonces, es buena, porque Dios mismo la evaluó así.
  • Otro punto: Dios separó la luz de las tinieblas. Tanto la luz como la oscuridad están bajo el control de Dios, y ninguna de ellas hace alguna diferencia para su actividad y conocimiento (ver Sal. 139:12). Dios dio nombre a las porciones oscura e iluminada del tiempo, llamándolos "día" y "noche". Dios tiene derecho de dar nombres a los períodos del tiempo porque él es el Creador del tiempo. Siendo Dios soberano del tiempo, este último no lo limita. Más bien, depende de él.
  • Otro punto es que hubo un período de oscuridad y un período de luz que juntos conformaron un día. Se ha escrito mucho acerca del significado de "día" en la creación. Veremos esto más tarde, pero notamos que el primer día estuvo compuesto de un período de oscuridad y un período de luz, lo mismo que en la actualidad.
  • También, la luz es uno de los rasgos que acompañan la presencia de Dios. No necesitamos suponer que la luz fue inventada el primer día de la creación, ya que Dios existió antes que la Tierra fuera creada y su presencia a menudo es asociada con la luz (1 Juan 1:5; Apoc. 22:5). En la creación, la luz fue introducida en un planeta previamente oscuro.

¿Cómo pudo haber día y noche antes de la introducción del sol en el informe de la creación? Seguramente, Moisés conocía la conexión entre el sol y la luz del día. No obstante, él escribió acerca de la luz y la oscuridad en el primer día. Dios debe haberle dado un conocimiento acerca de la creación que nosotros, actual­mente, no comprendemos; un conocimiento que no se puede discernir mirando el mundo natural. Entonces, ¿por qué nos sorprende que algunas cosas acerca de la creación sigan siendo un misterio?