“Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca”
Santiago 5:8
MODELOS DE PACIENTE PERSEVERANCIA
Lee Santiago 5:10 y 11. ¿Qué tienen en común Job y los profetas? ¿Por qué se subrayan estos ejemplos? ¿Qué lecciones personales podemos obtener de estas historias?
Los profetas de Israel predicaron la palabra de Dios sin alterarla ni comprometerla. Hebreos, al exaltar la fidelidad de los profetas, pinta un cuadro claro: “taparon bocas de leones, apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada [...] experimentaron [...] prisiones y cárceles. Fueron apedreados, aserrados [...] muertos a filo de espada” (Heb. 11:33-37). Los sufrimientos de Job son proverbiales, como es la paciencia que mostró ante las burlas de su esposa y la censura de sus “amigos”. ¿Qué separó a estos héroes de la fe de los seguidores comunes de Dios? Santiago menciona varias cualidades: paciencia, perseverancia y, por sobre todo, esperanza y confianza en Dios.
Uno de esos atributos es la “paciencia” (makrothumías), también traducida como “longanimidad”, o “tolerancia”; es decir, mantenerse sereno bajo circunstancias difíciles, soportando cualquier cosa que la vida (¡o el diablo!) les arroje. Los profetas soportaron todo su sufrimiento por Dios con paciencia (Sant. 5:10). La palabra se usa con frecuencia en el Nuevo Testamento; incluye una referencia a Abraham, que esperó con “paciencia”, durante su larga peregrinación, que Dios cumpliera su promesa de un hijo (Heb. 6:12, 15). También describe a Jesús, que soportó pacientemente su sufrimiento y su muerte en la cruz (2 Ped. 3:15).
“Perseverancia” (hupomoné), por otro lado, se concentra en la meta final de este proceso, mirando la línea de llegada. Job es como el compendio de esta cualidad. A pesar de todo lo que sufrió, Job esperaba la vindicación final (Job 14:13-15; 19:23-27).
¿Con qué estás luchando en este momento? ¿Sobre qué estás orando que todavía no se ha realizado? ¿Perdiste la esperanza? Piensa en las pruebas de algunos personajes bíblicos; imagínate cómo se habrán sentido. ¿De qué manera sus sufrimientos te pueden ayudar en los tuyos?