“Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo” (Mat. 4:23).

JESÚS LLEGA A LA COMUNIDAD

sábado 23 de julio, 2016

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Lucas 4:16-18; 10:25-37; Mateo 5:13; Isaías 2:8; Juan 4:35-38; Mateo 13:3-9.

ROBERT L. STEVENSON, autor de La isla del tesoro, fue un muchacho enfermizo que no asistió mucho a la escuela. Sus padres contrataron a un maestro y a una nodriza para que lo ayudaran. Una noche, cuando su nodriza se asomó a su dormitorio, lo encontró mirando por la ventana, y lo mandó a la cama.

Robert le dijo: “Venga, y mire lo que estoy viendo”.

La nodriza se acercó a la ventana. Allí abajo, en la calle, había un farolero que encendía las luces de la calle. “Mire”, dijo Robert, “¡un hombre está haciendo agujeros en la oscuridad!”−Margaret Davis, Fear Not! Is There Anything Too Hard for God?, p. 332.

Hemos aprendido lo que dice el Antiguo Testamento acerca de ayudar a los necesitados. Ahora veremos que su enseñanza es que debemos ser “la luz del mundo” (Mat. 5:14), y así reflejar a Jesús, la verdadera Luz (Juan 8:12). Las enseñanzas de Jesús en su ministerio dan instrucciones poderosas acerca de cómo nosotros, por medio de él, podemos hacer agujeros en la oscuridad.