“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz” (Isa. 9:6).

FIN DE LA OSCURIDAD PARA GALILEA (ISA. 9:1–5)

domingo 24 enero, 2021

¿Por qué Isaías 9:1 comienza con una palabra (Mas/Pero/Sin embargo) que indica un contraste con lo que la precede?

Isaías 8:21 y 22 describe la condición desesperada de aquellos que recurren al ocultismo y no al Dios verdadero: por donde miren, solo verán “tribulación y tinieblas, oscuridad y angustia; y serán sumidos en las tinieblas” (Isa. 8:22). Al contrario, llegará un momento en que “no habrá [...] oscuridad para la que está ahora en angustia” (9:1). La gente de la región de Galilea se distingue aquí por recibir la bendición especial de “gran luz” (9:2). La nación se multiplicará y se alegrará porque Dios habrá quebrado “el cetro de su opresor” (9:4).

Aquí se describe la región del lago de Galilea porque fue uno de los primeros territorios de Israel en ser conquistado. En respuesta a la solicitud de ayuda de Acaz, Tiglat-pileser III tomó las regiones de Galilea y Transjordania pertenecientes a Israel, en el norte, llevó a algunos cautivos y transformó los territorios en provincias asirias (2 Rey. 15:29). Entonces, el mensaje de Isaías es que el primero en ser conquistado sería el primero en ver la liberación.

¿A quién utiliza Dios para liberar a su pueblo? Isaías 9:6, 7.

¿Cuándo y cómo se cumplió la profecía de Isaías 9:1 al 5? Mateo 4:12-25.

No por casualidad, Jesús comenzó su ministerio en la región de Galilea, donde dio esperanza al anunciar las buenas nuevas del Reino de Dios y sanar a la gente, e incluso libertó a endemoniados de la esclavitud del ocultismo (Mat. 4:24).

Aquí es donde vemos un ejemplo perfecto de cómo la Biblia toma hechos que sucedieron en los tiempos del Antiguo Testamento y los utiliza para prefigurar cosas que sucederán en los tiempos del Nuevo Testamento. El Señor combinó imágenes de una época con las de otra, como en Mateo 24, cuando Jesús relacionó la destrucción de Jerusalén en el año 70 d.C. con la destrucción del fin del mundo.

¿Si alguien te preguntara: “¿De qué te ha librado Jesús?”, qué responderías? ¿Qué testimonio personal puedes dar sobre el poder de Cristo en tu vida?

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