“Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti” (Gén. 17:7).
PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:
Lee Elena de White, Patriarcas y profetas, “El llamamiento de Abraham”, pp. 117-124; Los hechos de los apóstoles, “Judíos y gentiles”, pp. 155-165.
El arco iris es una señal del pacto de Dios con Noé. Lee Génesis 17:10 para descubrir cuál fue la señal del pacto de Dios con Abraham. La circuncisión “estaba destinada: (1) a distinguir la descendencia de Abraham de la de los gentiles (Efe. 2:11); (2) a perpetuar el recuerdo del Pacto de Jehová (Gén. 17:11); (3) a fomentar el cultivo de la pureza moral (Deut. 10:16); (4) a representar la justificación por la fe (Rom. 4:11); (5) a simbolizar la circuncisión del corazón (2:29); y (6) a prefigurar el rito cristiano del bautismo (Col. 2:11, 12)” (CBA 1:335).
El arco iris permanecerá como una señal de la promesa de Dios hasta el fin del mundo; pero la señal de la circuncisión, no. Según el apóstol Pablo, Abraham recibió la circuncisión como una muestra de la justicia que había recibido por la fe en Dios (Rom. 4:11). Sin embargo, a través de los siglos, la circuncisión llegó a significar la salvación por la obediencia a la Ley. Para la época del Nuevo Testamento, la circuncisión había perdido su significado. El elemento esencial es la fe en Jesucristo, que conduce a una vida transformada y obediente. Lee Gálatas 5:6 y 6:15; y 1 Corintios 7:18 y 19.
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
- Analiza la relación entre la fe y las obras. ¿Puede haber una sin la otra? Si no, ¿por qué no?
- “Muchos continúan siendo probados como lo fue Abraham. No oyen la voz de Dios hablándoles directamente desde el cielo; pero, en cambio, son llamados mediante las enseñanzas de su Palabra y los acontecimientos de su providencia. Se les puede pedir que abandonen una carrera que promete riquezas y honores, que dejen afables y provechosas amistades, y que se separen de sus parientes, para entrar en lo que parezca ser solo un sendero de abnegación, trabajos y sacrificios. Dios tiene una obra para ellos; pero una vida fácil y la influencia de las amistades y los parientes impediría el desarrollo de los rasgos esenciales para su realización. Los llama para que se aparten de las influencias y los auxilios humanos, y les hace sentir la necesidad de su ayuda, y de depender solo de Dios, para que él mismo pueda revelarse a ellos. ¿Quién está listo para renunciar a los planes que ha abrigado y a las relaciones familiares en cuanto lo llame la Providencia?” (PP 105). Analiza algún ejemplo contemporáneo de alguien que conozcas que atendió a este mismo llamado.
Resumen: Dios llamó a Abraham a una relación especial con él, mediante la cual revelaría el plan de salvación al mundo.