“Y el varón le dijo: No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel; porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido” (Gén. 32:28).
PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:
Lee Elena de White, Patriarcas y profetas, “La noche de lucha”, pp. 194–202. “La experiencia de Jacob durante aquella noche de lucha y angustia representa la prueba que habrá de soportar el pueblo de Dios inmediatamente antes de la segunda venida de Cristo. [...]
“Tal será la experiencia del pueblo de Dios en su lucha final contra los poderes del mal. Dios probará la fe de sus seguidores, su perseverancia y su confianza en su poder para librarlos. Satanás se esforzará por aterrarlos con el pensamiento de que su situación no tiene esperanza; que sus pecados han sido demasiado grandes para recibir perdón. Tendrán un profundo sentimiento de sus faltas y, al examinar su vida, verán desvanecerse sus esperanzas. Pero, recordando la grandeza de la misericordia de Dios, y su propio arrepentimiento sincero, pedirán el cumplimiento de las promesas hechas por medio de Cristo a los pecadores desamparados y arrepentidos. Su fe no faltará porque sus oraciones no sean contestadas inmediatamente. Se asirán de la fortaleza de Dios, como Jacob se asió del Ángel, y el lenguaje de su alma será: ‘No te dejaré, si no me bendices’. [...]
“Sin embargo, la historia de Jacob es una garantía de que Dios no desechará a quienes fueron arrastrados al pecado, pero volvieron al Señor con arrepentimiento verdadero. Por la entrega de sí y por su fe confiada, Jacob logró lo que no había podido alcanzar por luchar con su propia fuerza. Así, Dios enseñó a su siervo que solo el poder y la gracia divinas podían darle las bendiciones que anhelaba. Así ocurrirá con los que vivan en los últimos días. Cuando los peligros los rodeen y la desesperación se apodere de su alma, deberán depender únicamente de los méritos de la Expiación. Nada podemos hacer por nosotros mismos” (PP 199-201).
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
- ¿Por qué la debilidad de Jacob es la oportunidad para la gracia de Dios? ¿Cómo se relaciona la experiencia de Jacob con la declaración de Pablo: “[...] cuando soy débil, entonces soy fuerte” (2 Cor. 12:10)?
- ¿Por qué crees que la Biblia revela tantos detalles sórdidos de la vida de muchos de sus personajes? ¿Cuál será la intención detrás de esto? ¿Qué mensaje podemos extraer de esto?
- Analicen el tema de la idolatría. ¿Cuáles son los ídolos de nuestra cultura, de nuestra civilización? ¿Cómo podemos asegurarnos de que no estamos adorando a nadie ni a nada más que al Señor?