“Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador” (Gén. 37:19).

PROBLEMAS FAMILIARES

domingo 5 de junio, 2022

Jacob finalmente “se estableció en la tierra” (Gén. 37:1, NVI). Sin embargo, mientras se instalaba en la tierra comenzaron los problemas, esta vez desde el seno de la propia familia. La polémica no se refiere a la posesión de la tierra ni al uso de un pozo; básicamente es espiritual.

Lee Génesis 37:1 al 11. ¿Qué dinámica familiar predispuso a los hermanos de José a odiarlo tanto?

Desde el mismo comienzo, entendemos que José, el hijo de la vejez de Jacob (Gén. 37:3), disfrutó de una relación especial con su padre, quien “lo amaba más que a todos sus hermanos” (Gén. 37:4). Incluso llegó a hacerle “una túnica de diversos colores” (Gén. 37:3); una vestimenta de príncipe (2 Sam. 13:18), una indicación de la intención secreta de Jacob de elevar a José, el primer hijo de Raquel, al estatus de primogénito.

Por cierto, el futuro confirmará los deseos de Jacob porque José finalmente recibirá los derechos del primogénito (1 Crón. 5:2). No es de extrañar, entonces, que los hermanos de José lo odiaran tanto y ni siquiera pudieran entablar conversaciones pacíficas con él (Gén. 37:4).

Además, José le llevaba malos informes a su padre sobre cualquier comportamiento reprobable de sus hermanos (Gén. 37:2). A nadie le gustan los soplones.

Por eso, cuando José compartía sus sueños, sugiriendo que Dios lo pondría en una posición más elevada y que ellos, sus hermanos, se inclinarían ante él, lo odiaban aún más. La verdadera naturaleza profética de los sueños incluso se ratifica por el hecho de que se repiten (ver Gén. 41:32). Aunque Jacob reprendió abiertamente a su hijo (Gén. 37:10), conservó este asunto en su mente, meditando sobre su significado y esperando su cumplimiento (Gén. 37:11). La implicación es que quizás en el fondo pensaba que, a fin de cuentas, podría haber algo en estos sueños. Tenía razón, aunque no lo supiera en ese momento.

Lee Mateo 20:26 y 27. ¿Qué principio crucial se revela aquí, y cómo podemos aprender a manifestar en nuestra propia vida lo que enseña?