“Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada” (Isa. 53:10).
PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:
Lee Elena de White, Patriarcas y profetas, “La prueba de la fe”, pp. 141-150; Testimonios para la iglesia, “Alabad a Dios”, t. 5, pp. 295-298.
“Dios probó siempre a su pueblo en el crisol de la aflicción. Es en el fuego del crisol donde la escoria se separa del oro puro del carácter cristiano. Jesús vigila la prueba; él sabe qué se necesita para purificar el precioso metal, para que pueda reflejar el esplendor de su amor. Es por medio de pruebas estrictas y reveladoras como Dios disciplina a sus siervos. Él ve que algunos tienen aptitudes que pueden usarse en el progreso de su obra, y los somete a pruebas; en su providencia, los coloca en situaciones que prueban su carácter [...]. Les muestra sus propias debilidades, y les enseña a depender de él [...]. Así alcanza su objetivo. Son educados, adiestrados, disciplinados y preparados para cumplir el gran propósito para el cual recibieron sus capacidades” (PP 122,123).
“Si en la providencia de Dios somos llamados a soportar pruebas, aceptemos la cruz, y bebamos la copa amarga, recordando que es la mano de un Padre la que la ofrece a nuestros labios. Confiemos en él, en las tinieblas como en la luz del día. ¿No podemos creer que nos dará todo lo que fuere para nuestro bien? [...] Aun en la noche de aflicción, ¿cómo podemos negarnos a elevar el corazón y la voz en agradecida alabanza, cuando recordamos el amor por nosotros expresado en la Cruz del Calvario?” (TI 5:295)
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
- En clase, pide que alguien relate una dura prueba de fe, similar a la de Abraham. ¿Qué pueden aprender de la experiencia de esa persona, de sus éxitos o fracasos?
- Repasen las últimas 24 horas de la vida de Cristo antes de su crucifixión. ¿Qué extremos enfrentó? ¿Cómo los soportó? ¿Qué principios podemos tomar de su ejemplo y aplicarlos a nuestra vida cuando estemos en medio de nuestro crisol?
- Analicen la idea, que se mencionó esta semana, acerca de cómo mediante nuestro sufrimiento podemos ayudar a otros que también sufren. ¿Cuáles son algunos de los problemas que podrían surgir con esta idea?
- Elena de White escribió anteriormente: “Confiemos en él, en las tinieblas como en la luz del día”. Es más fácil decirlo que hacerlo. ¿Cómo podemos ayudarnos mutuamente a desarrollar el tipo de fe que nos permita hacer precisamente eso? ¿Por qué es importante confiar en Dios en los tiempos difíciles?