“Santifícalos en la verdad. Tu palabra es verdad” (Juan 17:17).
IDENTIFIQUEMOS A LA BESTIA: PRIMERA PARTE
Apocalipsis 13:1 y 2. ¿De dónde surge esta bestia y quién le da autoridad?
El libro de Apocalipsis identifica al dragón principalmente como Satanás. Apocalipsis 12:3 al 5 dice que el dragón intentó destruir, “en cuanto naciera”, al “Hijo varón”, que más adelante fue “arrebatado para Dios y para su trono”. Fue el diablo, mediante la Roma pagana, quien intentó destruir a Cristo (ver Mat. 2:16-18). El archienemigo de Dios y del hombre obra mediante instituciones políticas y religiosas para lograr sus propósitos.
Sobre el poder de esta bestia, se nos dice: “el dragón le dio su poder, su trono y gran autoridad” (Apoc. 13:2). Esta profecía se cumplió con precisión cientos de años más tarde, cuando el emperador romano Constantino trasladó su capital de Roma a lo que llegó a llamarse Constantinopla, en la actual Turquía. Esto dejó un vacío de poder en el antiguo trono, o sede, de los césares, la ciudad imperial de Roma. Así, la Roma pagana le dio a la bestia su sede, o capital.
Isaac Backus declaró: “Al trasladar la sede del Imperio a Constantinopla, [...] Constantino dio paso a que el obispo de Roma se exaltara a sí mismo por encima de todos los hombres de la Tierra, y por encima del Dios del Cielo” (The Infinite Importance of the Obedience of Faith, and of Separation from the World, p. 16; citado en LeRoy Edwin Froom, The Prophetic Faith of Our Fathers, t. 3, p. 213). Según Thomas Hobbes, “el papado no es otra cosa que el fantasma del difunto Imperio Romano que, coronado, se sienta sobre su tumba” (Leviathan [Nueva York: Oxford University Press, 1996], p. 386). Un análisis cuidadoso revela que la bestia que sube del mar, de Apocalipsis 13, es un poder religioso apóstata que surge de Roma y se convierte en un sistema mundial de adoración (Apoc. 13:3, 4). Esta bestia no es una persona; es una organización religiosa que ha sustituido la verdad de la Palabra de Dios por decretos humanos.
Lee Apocalipsis 13:1 y 6. ¿Qué palabra clave se utiliza para identificar el poder de la bestia?
La Biblia define la blasfemia en Juan 10:33 y Lucas 5:21 con dos ejemplos: (1) un hombre que pretende ser Dios o dice ser Dios, y (2) un hombre que dice tener el poder de perdonar pecados. Estas acusaciones eran injustas porque Jesús es verdaderamente Dios y, por lo tanto, tiene el derecho de perdonar pecados. El papado romano tiene dos doctrinas distintivas que la Biblia llama blasfemia: afirma que sus sacerdotes tienen el poder de perdonar pecados y que el papa tiene las prerrogativas de Dios en la Tierra.