La ley de Dios desde una perspectiva bíblica
Al hablar de la ley de Dios debemos recordar que la biblia dice que la ley de Dios los Diez mandamientos fueron escritos por Dios en el monte Sinaí, Deuteronomio 5: 22 Estas son las palabras que el Señor pronuncio con voz fuerte desde el fuego, la nube y la densa oscuridad, cuando ustedes estaban reunidos al pie de la montaña. No añadió nada más. Luego las escribió en dos tablas de piedra, y me las entrego. Tal vez usted puede decir Pastor pero recuerde que Moisés destruyo esa ley escrita en dos tablas de piedra y es cierto porque Deuteronomio 9: 17 Así que tome las dos tablas que traía en las manos y las arroje al suelo, haciéndolas pedazo delante de ustedes. Pero la biblia dice que Jehová nuevamente le ordena a Moisés que labre dos tablas de piedras y suba al monte Deuteronomio 10: 1 - 2 En aquel tiempo el Señor me dijo: Talla dos tablas de piedra iguales a las primeras, y haz un arca de madera; después de eso, sube a la montaña para que te encuentres conmigo. Yo escribiré en esas tablas las mismas palabras que estaban escritas en las primeras, y después las guardaras en el arca.
No olvidemos que los Diez Mandamientos dictados por Dios desde el monte Sinaí, ya existían, la Biblia así lo confirma. Génesis 2: 2,3 el sábado esta dentro de los mandamientos de Dios y existe desde la creación.
Génesis 26: 5 Porque Abraham me obedeció y cumplió mis preceptos y mis mandamientos, mis normas y mis enseñanzas. Abrahán reconocía y obedecía la ley moral de Dios. Abrahán tenía una responsabilidad que observar; mandamientos que obedecer; estatutos que reconocer; y leyes que seguir. Y Dios probo a su pueblo, durante la experiencia que este paso en el desierto, en cuanto a si andaría en sus mandamientos. La prueba vino en el asunto del sábado Éxodo 16: 23 Esto es lo que el Señor ha ordenado les contesto. Mañana sábado es día de reposo consagrado al Señor. Así que cuezan lo que tienen que cocer, y hiervan lo que tengan que hervir. Lo que sobre, apártenlo y guárdenlo para mañana. Y una comparación de Éxodo 16: 1 con Éxodo 19: 1 Demuestra que esto ocurrió varias semanas antes de la promulgación del de los Diez Mandamientos. [1]
Por otra parte 1 de Juan 3: 4 Todo el que comete pecado quebranta la ley; de hecho, el pecado es transgresión de la ley. Dice que el pecado es transgresión de la ley, quiere decir que la ley existió antes del pecado. Ezequiel 28: 16 dice que Lucifer se lleno de iniquidad y peco, quiere decir que transgredió la ley de Dios.
Podemos ver que la ley de Dios existe desde la eternidad Salmos 119: 142, 152. Tu justicia es siempre justa; tu ley es la verdad. Desde hace mucho conozco tus estatutos, los cuales estableciste para siempre.
La ley de Dios, por lo tanto es simplemente una expresión de la naturaleza de Dios en la forma de un requerimiento moral. Es una transcripción del carácter de Dios. [2]
Por otra parte debemos recordar que existe la ley ceremonial dada por Dios y escrita por Moisés Deuteronomio 31: 9, 24 Entregada por Moisés, su escritor, a los levitas Deuteronomio 31: 26. Es importante establecer la diferencia entre la ley Moral y Ceremonial: La ley Moral (Los Diez Mandamientos) es eterna adaptada a la condición caída del hombre. La ley ceremonial fue establecida como un símbolo del plan de salvación. No olvidemos que en el contexto de su propósito la ley ceremonial es: justa, perfecta, santa, buena y verdad. Tanto la ley de los Diez Mandamientos como la ley ceremonial participan de esas cualidades, pero tienen propósitos y limitaciones diferentes. Así dentro de sus limitaciones, la ley ceremonial era justa, perfecta, santa, buena y verdad.
El propósito principal de la ley ceremonial no acabo en el calvario. Mas bien la acción a la que señalaba fue transferida a Cristo, que ahora ministra como nuestro sumo sacerdote en el santuario celestial. La acción de la ley ceremonial servia como un símbolo que señalaba a la obra de Cristo como la realidad simbolizada. [3]
Por lo tanto podemos ver que la ley Ceremonial y la ley Moral en vez de estar en oposición se complementan mutuamente cumpliendo cada una su propósito divino.
¿Pero cuál es la función de la ley de Dios en la vida del cristiano? Romanos 3: 20 Por tanto, nadie será justificado en presencia de Dios por hacer las obras que exige la ley; más bien, mediante la ley cobramos conciencia del pecado. Así que la biblia dice que la ley de Dios te señala el pecado, cuya penalidad es la muerte. La ley no puede salvar al transgresor de su pecado, ni impartir poder para guardarlo de pecar. Dios proporciono un medio para lograr ese fin. 2 Corintios 5: 21 Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trato como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios. Visto desde el punto de vista bíblico Somos justificados, no por obediencia a la ley, sino por la gracia que es en Cristo Jesús. La ley nunca se ideo para salvar. La ley está diseñada para revelar el pecado; la gracia está diseñada para salvar del pecado.
Sin embargo la ley es una transcripción del carácter de Dios. La ley de Dios, por lo tanto, es simplemente una expresión de la naturaleza de Dios en la forma de un requerimiento moral. Es un reflejo escrito de quien es Jesús en su persona, Jesús es la ley vivida en persona, la ley está escrita en tablas de piedras pero esa ley está incorporada en una persona Cristo Jesús, Jesús demuestra lo que significa vivir en armonía con la santa ley. Jesús era la ley en carne humana, la ley escrita se halla ilustrada en forma viva en la vida de Cristo Jesús, Cristo es la realidad y su ley es un reflejo exacto de quien es él en persona.
Es por eso que la ley moral es mucho más que un código legal; pecar contra la ley es pecar contra Jesús porque la ley es un reflejo escrito de quien es Jesús en persona porque Jesús es la encarnación de la ley de Dios. Jesús es la ley en carne humana. Los diez mandamientos son ese carácter en forma escrita. Salmos 40: 7- 8 Por eso dije: Aquí me tienes como el libro dice de mí. Me agrada, Dios mío, hacer tu voluntad; tu ley la llevo dentro de mi. Por lo tanto la ley está escrita en tablas de piedra y en el corazón de Jesús y por lo tanto cuando Jesús vive esta en armonía con la ley porque él es la ley en forma vivida.
[1] George R. Knight. Preguntas sobre doctrina, Pág. 141
[2] Ibid. 109
[3] Ibíd. 118