Y la ciencia encontró a Dios
Dina Rocío Carpintero
El Diseñador
Un comentarista de noticias expresó lo siguiente: No creo que ahora, en pleno siglo XXI existan personas que crean en un proceso de creación en siete días. ¡Eso es imposible!
Piense en lo siguiente: “Una familia de ratones vivía en un gran piano. Para ellos, simplemente, la música provenía del instrumento. Se sentían cómodos con el pensamiento de que el invisible que producía la música estaba arriba, pero cerca. Les gustaba pensar en el gran pianista que no veían.
Un día una ratita atrevida trepó al piano y volvió con una nueva teoría. El secreto estaba en las cuerdas. Más tarde otro explorador vino con una nueva explicación: los martillos eran el secreto. El pianista invisible llegó a ser considerado un mito. Sin embargo, el pianista continuaba tocando.” (Tomado de Diálogo Universitario, vol. 5, N” 1 (enero—abril 1993), p. 25)
Es imposible pensar que los grandes diseños surgen en forma aleatoria y de la nada. Cada trazo, cada espacio, cada elemento es cuidadosamente estudiado en términos de utilidad, necesidad, durabilidad antes de quedar finalmente colocado en el plano final de un diseño especifico. Esto tiene que surgir de la mente creativa de alguien.
Piensa en aquellos elementos que admiras en la naturaleza, busca cómo son diseñados y cómo funcionan. Elabora una lista de ellos y comparte en tu grupo pequeño lo que descubriste.
El diseño, ¿por qué es importante creer en la creación?
La tierra fue premeditadamente diseñada para que hubiera vida. Si la distancia del sol a la tierra fuera un 2% más corta, las condiciones de calor eliminarían toda forma de vida; si fuera un 1% mayor habría un frío extremo que no permitiría forma alguna de vida. Ejemplos como estos no dejan lugar a dudas que la perfecta armonía y preparación que existe en la tierra no fue un hecho casual o aleatorio, sino que fue diseñado específicamente para mantener vida.
En la creación, se habían puesto los fundamentos para la vida en la tierra, había belleza, elementos útiles para el hombre, maravillas de la tierra y del mar. Al ver las evidencias de la sabiduría y bondad de Dios, el corazón se llenaría de amor y reverencia al Hacedor. Además, el día sábado se constituyó en un recordativo de la creación. (Patriarcas y Profetas, pág. 32)
Piensa en la siguiente pregunta y lleva respuestas para compartir con tu grupo pequeño: Sin creación, ¿qué es el sábado?
El Diseñador y yo
¿Cómo afecta mi vida, mi trato con los demás, mi actuar, saber que soy un ser creado por Dios?
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El trato a los semejantes y a la naturaleza es impactado por este pensamiento. Creados a su imagen (Gen. 1:26, 27).
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Imaginar ser creado por Dios genera un sentimiento de humildad que motiva a cumplir la misión que Dios tiene para cada uno de nosotros.
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“Vi un cielo nuevo y una tierra nueva” (Apoc. 21:1) El Dios creador me asegura un plan para mi salvación.
Piensa en otras ideas que puedas compartir con tus compañeros.