"Y amaba Israel a José más que a todos sus hijos, porque lo había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores" (Génesis 37:3).
Le quitaron la túnica
Lee Génesis 37:12 al 25. ¿Qué contraste entre el bien y el mal se nota aquí; entre la inocencia y la traición?
No solo los hermanos de José maquinaron su muerte, también planearon por adelantado lo que le dirían a su padre. Oh, padre. Lo lamentamos mucho. Encontramos este manto. ¿Es el de José? Si es así, un animal feroz debió haberlo devorado. Es difícil imaginar cómo alguien podría estar tan lleno de odio contra su propio hermano que pudiera hacer algo así.
Lee Génesis 37:23. ¿Qué hecho importante sucedió allí?
Lo primero que recordaron los hermanos, cuando vieron a José a la distancia, fueron sus sueños, que hacían que su odio hacia él creciera. Ahora podrían ver qué resultaría de sus sueños. Es interesante notar que el primer acto de sus hermanos, contra José, fue quitarle su manto. En el texto hebreo, resulta claro que era el tan odiado manto, el que el padre había hecho para él. El texto enfatiza que lo tenía "sobre sí". Junto con todo lo demás, verlo acercarse usando esa túnica, solamente debió haber añadido más motivos a su enojo.
De este modo, vemos a los hermanos intentando deshacerse de todo lo que les provocaba tanto odio e ira. Para ellos, la túnica simbolizaba lo que ellos odiaban acerca de su hermano, tanto las cosas buenas acerca de él como las malas acerca de sí mismos. Debió haber sido con mucha alegría, regocijo y satisfacción que le quitaron el manto. Ahora, de repente, sin la hermosa ropa, que simbolizaba lo que ellos temían que fuera la superioridad de José sobre ellos, José estaba impotente ante quienes, de acuerdo con los sueños de José, un día se inclinarían ante él.
Considera cuán irracionales fueron las acciones de los hermanos, como resultado de sus emociones. ¿Cuán a menudo permitimos que nuestras emociones nos conduzcan a realizar actos irracionales? ¿Cómo podemos aprender a guardar nuestras emociones bajo el poder de Dios y ahorrarnos así, a nosotros (y a menudo a otros también), las terribles consecuencias de hechos que se hicieron bajo arranques de emociones profundas?