"¿Y quién proclamará lo venidero, lo declarará, y lo pondrá en orden delante de mí, como hago yo desde que establecí el pueblo antiguo? Anúncienles lo que viene, y lo que está por venir" Isaías 44:7.

“No confiéis en palabras engañosas”: Los profetas y la adoración

sábado 20 de agosto, 2011

EL AUTOR RUSO IVÁN TURGÉNEV, en su historia Padres e hijos, pone las siguientes palabras en boca de uno de sus personajes: "La vida de cada uno de nosotros pende de un hilo, un abismo puede aparecer debajo de nosotros en cualquier momento; no obstante, nos salimos de nuestro camino para fabricar toda suerte de dificultades para nosotros y arruinar nuestras vidas".–Fathers and Sons, p. 131.

Por supuesto, Dios ofrece un camino mejor para vivir. Nos ofrece la oportunidad de seguirlo, de amarlo, de adorarlo, y por ello nos ahorra muchos de los problemas que de otro modo nos acarrearíamos.

Pero solo profesar seguir al Señor no es de lo que trata la vida cristiana. Esta semana consideraremos lo que algunos profetas dijeron acerca de quienes pensaban que su "adoración" al verdadero Dios, en el verdadero día sábado, era todo lo que importaba, sin importar cómo vivían durante la semana. Pero este es un engaño, una manera de "fabricar toda suerte de dificultades para nosotros".