"Pero lejos esté de mí gloriarme, si no en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo" (Gálatas 6:14).

JACTARSE DE LA CARNE

lunes 26 de diciembre, 2011

Lee Gálatas 6:12 y 13. ¿Qué quiere decir Pablo en estos versículos?

Aunque Pablo dio previamente indicios acerca de la motivación de sus adversarios (ver Gálatas 1:7; 4:17), sus declaraciones en Gálatas 6:12 y 13 son el primer comentario explícito que hace de sus adversarios. Los describe como deseando "ser bien vistos en lo humano" (BJ). La frase "bien vistos" es poner "una buena cara". La palabra "cara", en griego, es la misma que se usa para indicar la máscara de un actor, y se utilizaba para referirse al papel desempeñado por un actor. En otras palabras, Pablo dice que estas personas eran como actores que procuraban la aprobación de la audiencia. En una cultura basada en el honor y la vergüenza, la aprobación era esencial, y los que enseñaban los errores parece que deseaban recibir más honores de los judíos de Galacia y también de los judíos cristianos de Jerusalén.

Pablo plantea algo importante acerca de sus motivos: el deseo de evitar la persecución. La persecución puede entenderse involucrando abusos físicos, o aun en su forma más "suave": la exclusión y el acoso. Pablo había realizado, una vez, la primera de las formas (Gálatas 1:13), pero la última también tuvo su efecto sobre los cristianos.

Los líderes religiosos judíos tenían influencia política. Tenían la aprobación oficial de Roma; y muchos creyentes judíos querían mantener buenas relaciones con ellos. Al circuncidar a los gentiles y enseñar que tenían que observar la Tora, los agitadores en Galacia podían mantener un contacto amistoso con los judíos locales en la sinagoga, y podían fortalecer sus lazos con los creyentes judíos en Jerusalén, quienes sospechaban de la obra que se hacia entre los gentiles (Hechos 21:10, 21).

Cualquiera que haya sido la situación en la que Pablo pensaba, su significado es claro: "Todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución" (2 Timoteo 3:12).

Piensa en la razón que esta gente tenía para enseñar sus errores. Suena bastante razonable, si consideramos todo. ¿Qué nos debería decir esto acerca de que aun los "mejores" motivos pueden desviarnos si no somos cuidadosos? ¿Cuándo fue la última vez que terminaste haciendo cosas equivocadas por motivos correctos?