"Nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia" (2 Pedro 3:13).
LA RESTAURACIÓN DE LA RELACIÓN CON DIOS
“Antes de que el pecado entrara en el mundo, Adán gozaba de libre trato con su Creador” (CS 7). Sin embargo, después de la caída, esa relación estrecha se alteró radicalmente de diversas maneras.
Lee Génesis 3:24; Éxodo 33:20; y Deuteronomio 5:24-26. ¿Qué consecuencias tuvo el pecado en la relación estrecha que existía entre la humanidad y Dios?
El pecado rompió la relación entre Dios y la humanidad. Dios alejó a la pareja de su presencia para su propia protección. Los humanos ya no podían ver su rostro y seguir viviendo.
No obstante, Dios por su propia iniciativa trazó el plan de salvación, por medio del cual la relación rota podía ser sanada, aun a un terrible costo para él mismo.
Lee Juan 14:1-3, y Apocalipsis 22:3-5. ¿Qué promesa hizo Jesús a sus discípulos justo antes de ir a la cruz, y cuál será el resultado?
Dios y la humanidad serán reunidos en paz, y se verán cara a cara. La tierra no tendrá ninguna maldición, y todo lo que se había perdido estará restaurado. Los redimidos recibirán un nuevo medioambiente, una vida nueva, un dominio nuevo, una paz nueva con el resto de la creación, y una nueva relación con Dios. El propósito original de la creación de los humanos se cumplirá entonces: Dios, la raza humana y la creación estarán en armonía, y esa armonía durará para siempre.
Aun ahora, antes de la nueva creación del cielo y de la tierra, ¿cómo podemos aprender a gozar de una estrecha comunión con dios? ¿Qué decisiones tomamos que impactan a nuestra relación con dios, en forma positiva o negativa?