"He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo." Apocalipsis 3:20
PERCEPCIÓN Y REALIDAD
Hay una brecha entre lo que Laodicea dice y lo que hace. Hay una brecha aun mayor entre la experiencia espiritual que Laodicea cree que tiene y lo que realmente tiene.
Lee Apocalipsis 3:17. ¿Cuál es la evaluación que Laodicea hace de sí misma? ¿Cuál es la evaluación de Dios? ¿Cómo crees que la gente puede estar tan ciega a su verdadera condición espiritual? ¿De qué maneras podríamos nosotros ser ciegos con respecto a nuestra propia condición espiritual?
Uno de los engaños fatales de Satanás es cegarnos a la realidad de nuestras necesidades espirituales. Algunos de los líderes religiosos de los días de Jesús estaban ciegos a su propia pobreza espiritual. Eran miembros que leían la Biblia, guardaban el sábado, devolvían el diezmo y esperaban la venida del Mesías. No obstante, muchos estaban en la oscuridad con respecto al tipo de reino espiritual que él presentaría. Jesús los llamó "guías ciegos" (Mat. 23:24). Pablo escribe a la iglesia de Corinto acerca de quienes "el dios de este siglo cegó el entendimiento" (2 Cor. 4:4). Por esto, Jesús dijo que él vino para dar "vista a los ciegos" (Luc. 4:18). Jesús restaurará la visión espiritual que hemos perdido, si se lo permitimos. Cada vez que Jesús abría ojos ciegos en el Nuevo Testamento, estaba revelando su deseo de abrir los ojos de nuestras mentes para permitirnos ver claramente.
Lee Mateo 25:1 al 13. ¿Qué semejanzas hay entre las vírgenes insensatas y los miembros de la iglesia de Laodicea?
¿En qué formas puedes mantenerte espiritualmente alerta? ¿Por qué crees que es tan fácil llegar a ser espiritualmente indiferente? ¿Cuáles son algunas maneras de contrarrestar la apatía religiosa?