"Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros" Santiago 4:6, 7

REFORMA: DISPOSICIÓN A CRECER Y CAMBIAR

sábado 31 de agosto, 2013

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: 1 Juan 2:1-9; Filipenses 2:12­-14; Mateo 26:31-35; Juan 20:24-29; Lucas 15:11-21; Juan 5:1-14.

ANTES DE PENTECOSTÉS, los discípulos tenían necesidades espirituales impor­tantes. No comprendían bien el plan de Dios. No entendían la misión de Jesús. Después de ser conmovidos por la gracia divina, el amor de Cristo quebrantó sus corazones. Experimentaron un reavivamiento y una reforma.

El reavivamiento es el despertar de anhelos espirituales más profundos. Intensifica nuestros deseos de estar más cerca de Dios, mediante los impulsos del Espíritu Santo. El reavivamiento no implica que no hayamos tenido antes ex­periencias con Jesús, sino que nos llama a una experiencia más rica y profunda. La reforma nos llama a crecer y a cambiar. Nos invita a avanzar más allá en lo espiritual. Nos insta a reexaminar nuestras vidas a la luz de los valores bíblicos y a permitir que el Espíritu Santo nos dé poder para hacer los cambios necesarios a fin de vivir en obediencia a la voluntad de Dios.

Examinaremos vidas de creyentes del Nuevo Testamento que vieron creci­miento y cambio en su experiencia espiritual.