“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis”
Juan 14:1 al 3
¿De qué manera vendrá Jesús?
En su sermón profético, Cristo expresó preocupación por las enseñanzas erróneas que aparecerían con respecto a su segundo advenimiento, y advirtió a sus discípulos sobre personas que vendrían en su nombre, “diciendo: Yo soy el Cristo” (Mat. 24:5; ver también vers. 23-26). Él no desea que sus seguidores sean engañados. Por lo tanto, claramente indicó la manera en que vendría.
¿Qué nos dice Mateo 24:27 acerca de cómo regresará Jesús?
Los relámpagos destellan y alumbran todo el cielo de tal manera que todos pueden verlos. Así será la segunda venida de Jesús. No se necesitará ningún aviso para llamar la atención de las personas. Todos los seres humanos, buenos y malos, salvos y perdidos, incluso “los que le traspasaron” (Apoc. 1:7), lo verán venir (Mat. 26:64).
¿De qué forma 1 Tesalonicenses 4:13 al 18 nos ayuda a entender cómo será la segunda venida?
En su segunda venida, Cristo será visto con toda su gloria como “Rey de reyes y Señor de señores” (Apoc. 19:16). En la encarnación, el Hijo vino solo y sin esplendor externo, “sin atractivo para que le deseemos” (Isa. 53:2). Pero, esta vez, descenderá con toda su majestad y magnificencia, rodeado por “todos los santos ángeles” (Mat. 25:31) y “con gran voz de trompeta” (Mat. 24:31). Y, como si todo esto no fuera suficiente, los muertos en Cristo resucitarán para la inmortalidad.
Si confiamos en el Señor con respecto a un evento tan increíble como la segunda venida, ¿por qué no confiamos en él en cada aspecto de nuestra vida?