“Porque vendrán del oriente y del occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios” Luc. 13:29

CARACTERÍSTICAS DEL REINO DE DIOS: 2A PARTE

lunes 8 de junio, 2015

¿Qué nos enseñan los siguientes textos sobre de qué se trata la ciudadanía en el Reino de Dios?

Luc. 18:16-30

Luc. 12:31-33

Luc. 9:59-62

El ingreso al Reino de Dios no depende del estatus o la posición de la persona, o sus riquezas o falta de ellas. Lucas, junto con los escritores de los otros evangelios, señala que la persona debe ir a Jesús con una actitud de entrega sin compromisos, de absoluta dependencia y de confianza infantil; estos son los rasgos de quienes han entrado al Reino de Dios. Deben estar dispuestos a renunciar a todo si es necesario; porque cualquier cosa a la que no quisieran renunciar sería algo que, en un sentido, no solo competiría con Jesús sino también, en realidad, le ganaría. Jesús y su reclamo de nuestra vida, en cada aspecto de nuestra vida, tiene la máxima prioridad. Esto tiene lógica porque, después de todo, es solo por medio de él que existimos. Por supuesto, de esta forma, él debe tener toda nuestra lealtad.

Lee otra vez Lucas 18:29 y 30. ¿Qué nos está diciendo Jesús y qué nos promete? ¿Tener que dejar a los padres, a los cónyuges y aun a los hijos por el Reino de Dios? Ese es un compromiso exigente, ¿verdad? Jesús no está diciendo que estas acciones se requieran de todos los creyentes sino que, si uno fuera llamado a dejar esas cosas por causa del Reino de Dios, el Reino de Dios bien lo merecería.

Medita en las palabras de Jesús sobre dejar que los muertos entierren a sus muertos. ¿Qué verdad importante expresa aquí acerca de no presentar excusas que impidan seguirlo cuando llega el llamado, no importa cuán válidas pudieran parecer esas excusas?