“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo ad- quirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” (1 Ped. 2:9).

PEDRO Y EL GRAN CONFLICTO

sábado 5 de marzo, 2016

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: 1 Pedro 2:9, 10; Deuteronomio 14:2; 1 Pedro 4:1-7; 2 Pedro 1:16-21; 3:3-14; Daniel 2:34, 35.

LOS ESCRITOS DE PEDRO ABUNDAN con el tema del Gran Conflicto. Tal vez sea porque él sabía por sí mismo cuán fácil es caer presa de los engaños de Satanás. Él se daba cuenta de cuán real es la lucha. Por eso, Pedro escribió: “Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar” (1 Ped. 5:8).

Pedro ve que la lucha se desarrolla de diversas maneras. Ve una lucha en la iglesia, que incluye a los que una vez tuvieron comunión con los creyentes pero que ahora son cínicos, y desechan a Dios y cualquier idea del retorno de Cristo. Él se expresa con fuerza contra los burladores porque, si se perdiera la fe en la promesa del retorno de Cristo, ¿qué esperanza quedaría?

Pedro afirma su fe tan positivamente por causa de sus propios fracasos. Él sabía lo que era negar a Jesús y tratar de acomodarse a la multitud para no ser condenado como seguidor de Cristo. De allí su énfasis en cuán vital es una vida que refleje la vocación de elegir al Señor y ser digno de ella.