“Mas al extraño no seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños” (Juan 10:5).

DEBEMOS BUSCAR

lunes 5 de septiembre, 2016

Lee Lucas 19:10; Marcos 1:17; Lucas 9:2; y Apocalipsis 14:6 y 7. ¿Qué punto clave tienen en común estos pasajes? Es decir, ¿qué debemos hacer?

Durante años una congregación adventista del séptimo día oró: “Señor, por favor atrae a la gente de nuestra comunidad a nuestra iglesia y a ti”, como si la iglesia fuera un imán gigantesco que atraería a la gente. Algunas personas llegan a nuestras iglesias, buscando a Dios, sin ningún esfuerzo aparente de nuestra parte.

Pero ¿qué debe hacer tu iglesia cuando pasan los años y nadie de la comunidad entra por sus puertas? Si solo oras para que la gente venga, no estás usando el método de Jesús para ganar almas. Él se mezclaba con la gente, socializaba con ella y la buscaba para salvarla. “No hemos de esperar que las almas vengan a nosotros; debemos buscarlas donde estén. [...] Hay multitudes que nunca recibirán el evangelio a menos que este les sea llevado” (PVGM 181).

Varias metáforas ilustran esta idea de buscar:

1. El pastor deja las 99 en el redil y busca la que se ha apartado (ver Mat. 18:1-14). Jesús cuenta esta historia en el contexto de alimentar y proteger a los “pequeños” de pecar. Los “pequeños” pueden ser niños literales o cristianos inmaduros. Si se apartan al mundo, hemos de buscarlos tal como lo hizo Jesús, y traerlos de regreso a él con amor.

El punto aquí es, como en los textos citados arriba, que hemos de ser proactivos en buscar a los perdidos y hacer un esfuerzo para alcanzarlos. A veces sucede que alguien viene a nuestro encuentro y dice: “Enséñame acerca de Dios, de la salvación, de la verdad”; pero eso no es lo habitual, ¿verdad?

2. “El método de Cristo” de alcanzar a los perdidos “no será ni puede ser infructuoso” (MC 102). ¿Estamos nosotros concentrándonos solo en “la fruta que está más baja”: personas que ya comparten nuestra cosmovisión cristiana, como los cristianos de otras confesiones? ¿Qué estamos haciendo para llegar a la “fruta difícil de alcanzar”: personas secularizadas, ateos, musulmanes, judíos, hindúes, budistas, etc.? Históricamente, la gente con una cosmovisión cristiana encuentran relevante al adventismo, pero tenemos que hacer un trabajo mejor para compartir a Jesús con grupos religiosos que tienen cosmovisiones distintas.