“Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová” (Gén. 6:8).

“QUEDÓ SOLAMENTE NOÉ”

jueves 15 de abril, 2021

“Así fue destruido todo ser que vivía sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, los reptiles, y las aves del cielo; y fueron raídos de la tierra, y quedó solamente Noé, y los que con él estaban en el arca” (Gén. 7:23).

En este versículo se encuentra la primera mención del concepto de “remanente” en las Escrituras. La palabra traducida “quedó” proviene de otra palabra cuyas raíces se usan muchas veces en el Antiguo Testamento donde se transmite la idea de un remanente.

“Dios me envió delante de ustedes para preservarles un remanente en la tierra, y para guardarlos con vida mediante una gran liberación” (Gén. 45:7, NBLA; cursiva añadida).

“Y acontecerá que el que quedare en Sion, y el que fuere dejado en Jerusalén, será llamado santo; todos los que en Jerusalén estén registrados entre los vivientes” (Isa. 4:3; énfasis añadido).

“Asimismo acontecerá en aquel tiempo, que Jehová alzará otra vez su mano para recobrar el remanente de su pueblo que aún quede” (Isa. 11:11; énfasis añadido).

Analiza Génesis 7:23 y los otros ejemplos. ¿Cómo entiendes el concepto de remanente aquí? ¿Cuáles fueron las condiciones circundantes que dieron lugar a un remanente? ¿Cómo encaja el Pacto con la idea de un remanente?

Al momento del Diluvio, el Creador del mundo llegó a ser el Juez del mundo. El juicio mundial que se acercaba planteaba la cuestión de si toda la vida en la Tierra, incluso la vida humana, sería destruida. Si no, ¿quiénes serían los sobrevivientes? ¿Quién sería el remanente?

En este caso, fueron Noé y su familia. Sin embargo, la salvación de Noé estaba vinculada al pacto de Dios con él (Gén. 6:18); un pacto que tuvo su origen en un Dios de misericordia y gracia, y que fue ejecutado por él. Sobrevivieron solo por lo que Dios hizo por ellos, aunque su cooperación fue importante. Más allá de cuáles fueran las obligaciones del pacto de Noé, y sin importar con cuánta fidelidad las cumplió, su única esperanza estaba en la misericordia de Dios.

Sobre la base de nuestra interpretación de los acontecimientos de los últimos días, que incluye un momento en que Dios tendrá un remanente (ver Apoc. 12:17), ¿qué paralelismos podemos extraer de la historia de Noé que nos ayu darán a prepararnos para ser parte del Remanente? ¿En qué medida tomamos decisiones a diario que podrían impactar sobre de qué lado estaremos final mente en ese momento?