“Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti” (Gén. 17:7).

ETAPAS DEL PACTO (GÉN. 12:1, 2)

miércoles 21 de abril, 2021

En esos dos versículos se revela la primera etapa de la promesa del pacto de Dios a Abram (hay tres). Dios se acercó a Abram, le dio una orden y luego le hizo una promesa. Ese acercamiento manifiesta que Dios, en su misericordia, escogió a Abram para ser el primer personaje clave de su Pacto especial de gracia. La orden implica la prueba de confianza total en Dios (Heb. 11:8). La promesa (Gén. 12:1-3, 7), aunque fue destinada específicamente a los descendientes de Abram, en última instancia incluye una promesa para toda la raza humana (Gén. 12:3; Gál. 3:6-9).

La segunda etapa del pacto de Dios con Abram se presenta en Génesis 15:7 al 18. ¿En qué versículos encontramos algunos de los mismos pasos que aparecieron en la primera etapa? ¿El acercamiento de Dios al hombre? ¿Versículos? ¿El llamado a la obediencia humana? ¿Versículos?¿La promesa divina? ¿Versículos?

En el solemne ritual de la segunda etapa, el Señor apareció a Abram y pasó por entre los animales divididos cuidadosamente dispuestos. Abram mató y dividió a cada uno de los tres animales y colocó las dos mitades una contra la otra, con un espacio entre ellas. También mató a las aves, pero no las dividió. Los que establecían el pacto debían caminar entre las piezas divididas; de esta manera, prometían simbólicamente obediencia perpetua a las disposiciones solemnemente acordadas.

Describe lo que sucedió durante la tercera y última etapa del pacto divino con Abraham. (Ver Gén. 17:1-14.)

El nombre Abraham pone de relieve el deseo y el propósito de Dios de salvar a todos los pueblos. Las “muchedumbres de gentes” incluirían tanto a judíos como a gentiles. El Nuevo Testamento deja sobradamente en claro que los verdaderos descendientes de Abraham son quienes tienen la fe de Abraham y confían en los méritos del Mesías prometido. (Ver Gál. 3:7, 29.) Por lo tanto, ya desde Abraham, la intención del Señor era salvar a tantos seres humanos como fuera posible, independientemente de las naciones donde vivieran.

Lee Apocalipsis 14:6 y 7, el mensaje del primer ángel. ¿Qué paralelismos puedes encontrar entre lo que dice el ángel y lo que sucedió en el pacto con Abraham? ¿En qué medida los temas se asemejan?