“He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá” (Jer. 31:31).

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:

viernes 4 de junio, 2021

“Al participar con sus discípulas del pan y del vino, Cristo se comprometió como su Redentor. Les confió el Pacto Nuevo, por medio del cual todos los que lo reciben llegan a ser hijos de Dios, coherederos con Cristo. Por medio de este pacto, venía a ser suya toda bendición que el Cielo podía conceder para esta vida y la venidera. Este pacto debía ser ratificado con la sangre de Cristo. Y la administración del sacramento debía recordar a los discípulos el sacrificio infinito hecho por cada uno de ellos como parte del gran conjunto de la humanidad caída” (DTG 628).

“La característica más impresionante de este Pacto de Paz es la exuberante riqueza de la misericordia perdonadora manifestada al pecador si se arrepiente y se aparta de su pecado. El Espíritu Santo describe al evangelio como salvación por medio de las tiernas misericordias de nuestro Dios. ‘Porque seré propicio a sus injusticias’, declara el Señor a los que se arrepienten, ‘y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus iniquidades’ (Heb. 8:12). ¿Se aparta Dios de la justicia al manifestar misericordia hacia el pecador? No; Dios no puede deshonrar su Ley permitiendo que sea transgredida impunemente. Bajo el Nuevo Pacto, la perfecta obediencia es la condición para recibir vida. Si el pecador se arrepiente y confiesa sus pecados, encontrará perdón. Mediante el sacrificio de Cristo en su favor, se le asegura el perdón. Cristo ha satisfecho las demandas de la Ley para todo pecador arrepentido y creyente” (MGD 138)

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

  1. ¿Cuál es la ventaja de tener la Ley escrita en el corazón en vez de solo en tablas de piedra? ¿Qué es más fácil de olvidar, la Ley escrita en piedras o la Ley escrita en el corazón?
  2. Desde la caída de la humanidad, la salvación solo se encuentra en Jesús; aunque la revelación de esa verdad varió en diferentes épocas de la historia. Los Pactos ¿no funcionan de la misma manera?
  3. Analiza la segunda cita de Elena de White en el estudio de hoy. ¿Qué quiere decir con “perfecta obediencia” como requisito para una relación de pacto? ¿Quién es el único que ha ofrecido “perfecta obediencia”? ¿Cómo responde esa obediencia a las demandas de la Ley para con nosotros?

Resumen: El Nuevo Pacto es una revelación superior, más completa y mejor del Plan de Redención. Nosotros, los que participamos de ella, lo hacemos por fe, una fe que se manifestará en la obediencia a una Ley escrita en nuestro corazón.