“Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:14, 15).
UN PREFACIO A LA CRUZ
¿Cuál fue la reacción de los discípulos a las predicciones de Jesús sobre sus propios sufrimientos y muerte? ¿Qué deberían enseñarnos sus reacciones sobre los peligros de malinterpretar las Escrituras? Mat. 16:21–23 Mat. 17:22, 23; Mar. 9:30–32; Luc. 9:44, 45 Luc. 18:31–34
Jesús nació para morir y vivió para morir. Cada paso que daba lo acercaba más a su gran sacrificio expiatorio en la Cruz del Calvario. Plenamente consciente de su misión, no permitió que nada ni nadie lo distrajeran de ella. En realidad, “su vida entera fue un prefacio a su muerte en la Cruz” (FEC 423).
En el último año de su ministerio terrenal, Jesús habló cada vez más explícitamente a sus discípulos acerca de su muerte inminente. Pero ellos parecían reacios, no podían aceptar la realidad de sus declaraciones. Llenos de nociones falsas sobre el papel del Mesías, lo último que hubiesen imaginado de Jesús, especialmente como el Mesías, era que muriera. En resumen, su falsa teología los llevó a un dolor y un sufrimiento innecesarios.
Ya a Nicodemo, Jesús le había declarado: “Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:14, 15). Mientras estaba en Cesarea de Filipo, Jesús dijo a sus discípulos que tenía que “ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día” (Mat. 16:21). Al pasar en secreto por Galilea (Mar. 9:30–32) y durante su viaje final a Jerusalén (Luc. 18:31–34), Jesús habló nuevamente a sus discípulos acerca de su muerte y su resurrección. Como no era lo que querían escuchar, no escucharon. Qué fácil es para nosotros hacer lo mismo.
La gente, especialmente el pueblo escogido por Dios, tenía conceptos falsos con respecto a la primera venida del Mesías. ¿Cuáles son algunos de los conceptos falsos que existen hoy con respecto a la segunda venida de Jesús?