“Y cuando sus hijos les pregunten: ‘¿Qué significa este rito?’, responderán: ‘Es la víctima de la Pascua en honor del Señor, que pasó por alto las casas de los israelitas en Egipto, cuando hirió a los egipcios, y libró nuestras casas’ ” (Éxo. 12:26, 27).
PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:
Lee el capítulo titulado “La Pascua” en el libro Patriarcas y profetas, de Elena de White, pp. 279-285.
“La Pascua debía ser tanto conmemorativa como típica; no solo recordaría la liberación de Israel de Egipto, sino que también señalaría a la liberación más grande que Cristo realizaría para libertar a su pueblo de la servidumbre del pecado. El cordero del sacrificio representa al ‘Cordero de Dios’, en quien reside nuestra única esperanza de salvación. Dice el apóstol: ‘Nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros’ (1 Cor. 5:7). No bastaba que el cordero pascual fuese muerto; había que rociar con su sangre los postes de las puertas; así habrían de aplicarse los méritos de Cristo sobre el alma. Debemos creer, no solo que él murió por el mundo, sino que murió por cada uno individualmente. Debemos apropiarnos la virtud del sacrificio expiatorio” (Elena de White, Patriarcas y profetas, p. 281).
Las familias judías observantes de todo el mundo celebran hasta hoy la Pascua judía, o Pésaj. Durante la primera noche de la celebración realizan una ceremonia llamada “Séder de Pascua” (séder significa “orden”) durante la cual rememoran el éxodo y disfrutan luego de una comida especial en familia. Es asombroso que esto haya sido celebrado desde la época del éxodo. Solo el reposo sabático durante el séptimo día de la semana, que los judíos observantes también respetan, se remonta incluso más atrás en el tiempo, hasta el Edén.
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
- ¿Cómo es posible entender la “justicia” del Señor al dar muerte a los primogénitos, muchos de los cuales eran seguramente “inocentes”? ¿Cómo armoniza esto con la poderosa realidad del amor de Dios? Pensemos también en el Diluvio. ¿Cómo entenderlo?
- ¿Qué significan las expresiones metafóricas según las cuales los creyentes están “cubiertos” por la sangre de Jesús y su sangre los “limpia” de todas sus iniquidades?
- Medita en lo siguiente: “Los seguidores de Cristo deben participar de su experiencia. Deben recibir y asimilar la Palabra de Dios para que se convierta en el poder que motive su vida y acción. Mediante el poder de Cristo, deben ser transformados a su imagen y reflejar los atributos divinos... El espíritu y la obra de Cristo deben convertirse en el espíritu y la obra de sus discípulos” (Elena de White, Patriarcas y profetas, p. 282). ¿Cómo permitimos que Cristo haga en nosotros lo allí descrito?