"Porque has sido mi socorro, y así en la sombra de tus alas me regocijaré" (Salmos 63:7)

Más blanco que la nieve

miércoles 11 de mayo, 2011

En los Salmos penitenciales, el Salmo 32 alude a vestiduras, para señalar que  Dios cubre el pecado; y en el Salmo 51 hay imágenes de ropas que cubren el  pecado. Pero aquí el énfasis está en los agentes para lavar y blanquear, y en su  significado espiritual. Aquí David, metafóricamente, hace su "lavado de ropa sucia".

En el Salmo 51:2, David le pide a Dios que lo lave completamente. ¿Qué involucra este lavado? ¿De qué manera las imágenes de "purifícame con hisopo" y "será más blanco que la nieve" (verso 7) nos ayudan a comprender la naturaleza de esta purificación?

La palabra que usa David aquí para lavar se utiliza en otras partes para el lavado de una vestidura (ver Génesis 49:11 ; Éxodo 19:10 ). Purifícame sugiere la idea de hacer expiación por el pecado. El hisopo, una planta, era nutritivo y un agente sanador. El hisopo tenía una larga historia en Israel. Se usó en el rito original de la Pascua (Éxodo 12:22), en la limpieza de un leproso o de una casa (Levíticos 14:6, 49) y en la ofrenda de un becerro rojo para la purificación de personas o de cosas impuras. Moisés usó hisopo en la ratificación del pacto (Hebreos 9:19, 20).

Estos usos muestran que el hisopo era un buen agente limpiador. David usó el hisopo porque comprendía que solamente el mayor poder purificador podría limpiarlo de la mancha de su pecado: la sangre expiatoria de nuestro Salvador.

En Salmo 51:10, David ora pidiendo que Dios cree en él un corazón limpio. ¿Qué significa tener un "corazón limpio"?

Dios no solo limpia la iniquidad del corazón; crea en su hijo perdonado un corazón nuevo. Pablo nos exhorta: "No os conforméis  a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento" (Romanos 12:2) "por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo" (Tito 3:5, 6). La oración pidiendo perdón siempre debe estar unida a la oración por la renovación del corazón y una vida santa. David deseaba ser vestido con una naturaleza mental y moral nueva. Ora para perseverar en la obediencia y no ser privado de la conducción del Espíritu Santo.