“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” (1 Pedro 2:9).
INDIVIDUALES PERO JUNTOS
La iglesia no es un grupo de personas separadas que asisten al mismo lugar una vez por semana. Según la Biblia, la iglesia consiste en personas que están estrechamente ligadas como lo están las partes de un cuerpo. Pero es posible que las personas se reúnan sin ser parte de un cuerpo. Esto puede ser cierto, pero debemos concentrarnos en la necesidad de estar unidos en las áreas de la evangelización y de la testificación.
Lee Efesios 4:16. ¿Cuán efectivo sería un cuerpo si perdiera las articulaciones del codo, de la muñeca o de las rodillas? Y ¿qué dice Pablo de la iglesia como un cuerpo de creyentes, que recibió una misión?
Pablo dice que una iglesia crece cuando todos los miembros hacen su parte. ¿Qué indica esto acerca de las iglesias que no crecen? La primera reacción sería echarles la culpa a quienes creemos que no hacen su parte. Eso puede ser cierto, pero piensa: ¿cuán a menudo las iglesias privan a sus miembros de la oportunidad de contribuir al cuerpo? Si los líderes no comprenden el ministerio de todos los creyentes, no se esforzarán por hacerlos participar en la iglesia y en sus ministerios.
Lee 1 Tesalonicenses 1:5 al 8. ¿Qué hizo la iglesia de Tesalónica con el evangelio que había recibido de Pablo?
La iglesia de Tesalónica recibió el evangelio y lo compartió, y es un ejemplo. Dios todavía quiere que su iglesia actúe así.
Se reciben muchas bendiciones cuando cada feligrés actúa en una acción evangelizadora planificada. Dos áreas son importantes: el incentivo y la responsabilidad; y, al trabajar en equipo, debemos considerar estas áreas con seriedad. La falta de incentivo ha sido la muerte de muchos ministerios laicos valiosos. Las personas pueden poseer talentos y dones especiales, y deben trabajar hacia metas comunes, con estrategias corporativas. Del mismo modo, la dinámica del grupo estimula la responsabilidad de repasar y evaluar lo hecho, y no juzgar a otros.
¿Cómo podrías trabajar mejor con los miembros de la iglesia para alcanzar a otros? ¿Por qué es tan fácil volverse complaciente y somnoliento?