“Y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz” (Colosenses 2:15).
PRINCIPADOS Y POTESTADES: Primera parte
La Biblia describe nuestro mundo como bajo el dominio de las fuerzas del mal que procuran controlarnos y destruirnos. La gran controversia resulta de la obra de Dios contra estos poderes. Las buenas noticias son que, después de la crucifixión, la victoria está asegurada, aun cuando las batallas continúan. El conflicto es dramático, cósmico y feroz, pero la victoria pertenece a Dios, y la podemos compartir por la fe.
Estudia los siguientes textos: 1 Juan 3:8; 5:19; Juan 12:31; 16:11; Efesios 6:12; Colosenses 1:16; 2:15; Romanos 8:38, 39. ¿Qué nos revelan acerca de estas batallas? ¿Qué grandes esperanzas y promesas hay aquí para nosotros?
Muchas personas del siglo XXI actúan basadas en una cosmovisión solo científica. Es decir, examinan las cosas desde una perspectiva naturalista, la única que creen que es válida. Un mundo poblado con fuerzas malignas y dominado por poderes demoníacos es considerado como el rezago de una época de ignorancia. En cambio, la Biblia presenta un conjunto de fuerzas hostiles que abarcan principados y potestades. Aunque la cosmovisión bíblica incorpora conceptos naturalistas y científicos, ciertamente no basa en estos toda la comprensión de la realidad. El concepto bíblico del mundo abarca tanto la cosmovisión natural como la sobrenatural.
En Romanos 8:38, la palabra traducida como "principado" es, en griego, arjai, que puede referirse tanto a gobernantes civiles como a poderes sobrenaturales que ejercen un dominio maligno sobre el hombre. En Efesios 6:12, la frase "los gobernadores de las tinieblas de este siglo" podría traducirse también como "gobernantes mundiales de estas tinieblas".
"Es evidente que Pablo se refiere a espíritus con individualidad propia, los cuales ejercen cierto grado de autoridad sobre el mundo. Compárese esta declaración con la frase ‘príncipe de este mundo' (Juan 12:31; 14:30; 16:11), que describe a Satanás" (CBA 6:1,043).
¿Cómo se revela la gran controversia en tu vida? ¿Cómo sientes la lucha? ¿Cuál es la única forma de ser derrotado cuando tienes la promesa de la victoria de Cristo en tu favor?