"Mandó Jehová Dios al hombre diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás" (Génesis 2:16, 17).

HECHOS DE UNA SANGRE

martes 29 enero, 2013

En Génesis 2:23, se le da a Adán la tarea de poner nombre a su esposa, y la llamó Havvah, palabra relacionada con el verbo hayah, que significa “vivir”. La palabra hebrea para “Eva” (Havvah) puede ser traducida como “dadora de vida”. El nombre de Eva representa el hecho de que ella es la antepasada de todos los humanos. Todos somos una familia en el sentido más literal.

Lee Hechos 17:26. ¿Cómo vincula Pablo la hermandad de toda la humanidad con la creación? Compara con Mateo 23:9.

Estamos unidos pues descendemos de una mujer, Eva, y de un hombre, Adán. Dios es el Padre de todos nosotros. Este hecho es la base de la igualdad humana. Piensa en cuán diferentes serían las relaciones humanas si todos reconocieran esta verdad. Si alguna vez necesitáramos una prueba de cuánto daño nos ha hecho el pecado, está en el hecho de que los humanos a veces nos tratamos peor de lo que algunas personas tratan a los animales.

Lee Proverbios 14:31 y 22:2. ¿De qué modo estos textos nos ayudan a comprender el vínculo entre la moralidad y el hecho de que somos creados por Dios?

Muchos factores han dividido a la raza humana: políticos, nacionales, étnicos y económicos. Este es tal vez una de los de mayores consecuencias (aunque nunca al nivel que Karl Marx las visualizó). Hoy, como siempre, los pobres y los ricos a menudo se tratan con sospecha y desdén. ¡Cuán a menudo estos sentimientos condujeron a la violencia y aun a la guerra! Aunque la pobreza y la solución a ella todavía siguen desconcertándonos (ver Mateo 26:11), podemos tener por seguro lo que la Palabra de Dios afirma: ricos o pobres, todos merecemos la dignidad que es nuestra por virtud de nuestros orígenes.

Hace años, después de que el darwinismo se puso de moda, algunos justificaron la explotación que hacen los ricos de los pobres sobre la base del “darwinismo social”: afirmaban que si en el mundo natural los fuertes vencen y explotan a los débiles, también se podía aplicar el mismo principio a la economía. ¿Por qué un conocimiento correcto de los orígenes es vital para la comprensión de la moralidad?

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