“En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios. Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles”

Lucas 6:12 y 13

Discipular a los líderes espirituales

sábado 8 de marzo, 2014

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Lucas 6:12 al 16; Juan 16:7 al 14; Lucas 6:20 al 49; Jeremías 50:31; Isaías 57:15; Hechos 1.

AUNQUE JESÚS SIEMPRE se mantuvo activo en su obra de hacer discípulos, reconocía que su jornada terrenal era corta. Por lo tanto, se concentró en entrenar a discípulos para que continuaran la obra después de que él se fuera. Era tanto su Señor Maestro como su Señor Entrenador. Aunque enseñar y entrenar están relacionados, enseñar generalmente se refiere a la comunicación de conocimiento, mientras entrenar sugiere la formación o la calificación por medio de la práctica y la disciplina.

La preparación de los discípulos para el liderazgo ciertamente involucraba recibir conocimiento; sin embargo, el crecimiento espiritual era prioritario. Ellos necesitaban adquirir experiencia en las cosas de Dios, en la fe, en las dificultades, en la santificación, en el sacrificio propio, junto con una comprensión intelectual de las doctrinas y la teología. El solo conocimiento era una preparación insuficiente para los rigurosos desafíos que tenían por delante. Jesús les dio ambos.