“Y nos dio a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, que se había propuesto en Cristo, para que, llegado el tiempo, reuniera en él, bajo una sola cabeza, todo lo que está en el Cielo y lo que está en la tierra” (Efe. 1:9, 10).
ESCUCHAR LA CARTA A LOS EFESIOS
Pablo escribió Efesios para que se leyera en voz alta en los hogares-iglesias de los creyentes en la zona metropolitana de Éfeso. En los años transcurridos desde la partida de Pablo, el movimiento cristiano de Éfeso había crecido y la cantidad de hogares-iglesias se había multiplicado. Para esos primeros creyentes, debió de haber sido un evento importante tener a Tíquico, el representante personal de Pablo, el apóstol fundador, de pie entre ellos y compartiendo una carta del apóstol. Como lo sugiere la misma epístola, el grupo reunido probablemente incluía miembros de la familia anfitriona: padre, madre, hijos y esclavos (Efe. 5:21–6:9). En ese momento, un hogar también incluía a otros: mandantes (personas libres que dependían del jefe de hogar para su manutención) e incluso clientes. Por lo tanto, posiblemente también estuvieran presentes, así como miembros de otros hogares.
Además del bosquejo de la carta que aparece a continuación, lee toda la epístola, preferiblemente en voz alta (te llevará unos quince minutos hacerlo). ¿Qué temas resuenan a través de la carta como un todo?
I. Saludo inicial (Efe. 1:1, 2)
II. Bendición introductoria (Efe. 1:3–14)
III. Oración para que los creyentes reciban sabiduría en Cristo (Efe. 1:15–23)
IV. Una vez, muertos espiritualmente; ahora, exaltados con Cristo (Efe. 2:1–10)
V. Cristo crea la iglesia compuesta de judíos y gentiles (Efe. 2:11–22)
VI. Pablo como predicador de Cristo a los gentiles (Efe. 3:1–13)
VII. Pablo ora para que los creyentes experimenten el amor de Cristo (Efe. 3:14–21)
VIII. Conserven la unidad de la iglesia, inspirada por el Espíritu (Efe. 4:1–16)
IX. Anden en vida nueva y fomenten la unidad (Efe. 4:17–32)
X. Anden en amor, luz y sabiduría (Efe. 5:1–20)
XI. Practiquen una vida moldeada por Cristo en el hogar cristiano (Efe. 5:21–6:9)
XII. Manténganse unidos: la iglesia como el ejército de Dios (Efe. 6:10–20)
XIII. Saludo final (Efe. 6:21–24)
¿Qué tema clave se plantea en esta carta? ¿Qué te dice esto? ¿Qué puntos específicos te afectan personalmente?