“Para que sean afirmados vuestros corazones, irreprensibles en santidad delante de Dios nuestro Padre, en la venida de nuestro Señor Jesucristo con todos sus santos” (1 Tesalonicenses 3:13).

CONCLUSIÓN

viernes 10 agosto, 2012

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: "La llegada de Silas y Timoteo desde Macedonia durante la permanencia de Pablo en Corinto había alegrado grandemente al apóstol. Ellos le trajeron buenas nuevas de la ‘fe y amor' de los que habían aceptado la verdad durante la primera visita de los mensajeros evangélicos a Tesalónica. El corazón de Pablo simpatizaba tiernamente con esos creyentes que, en medio de la prueba y la adversidad, habían permanecido fieles a Dios" (HAp 210).

"El amor verdadero nacido del Cielo no es egoísta y cambiable. No depende de la alabanza humana. El corazón de aquel que recibe la gracia de Dios desborda de amor a Dios y a aquellos por los cuales Cristo murió. El yo no lucha para ser reconocido. No ama a otros porque ellos lo aman a él y le agradan, o porque aprecian sus méritos, sino porque constituyen una posesión comprada por Cristo. Si sus motivos, palabras o acciones son mal entendidos o falseados, no se ofende, sino que prosigue invariable su camino. Es amable y considerado, humilde en la opinión que tiene de sí mismo y, sin embargo, lleno de esperanza, y siempre confía en la misericordia y el amor de Dios" (PVGM 72, 73).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

1. En la cita de Palabras de vida del gran Maestro (arriba) y en muchos otros lugares, Elena de White usa la expresión "almas por las cuales Cristo murió" [o algún equivalente]. ¿Cuán ampliamente debe aplicarse esta frase? ¿A todos los seres humanos sobre la Tierra? ¿O solo a los creyentes en Cristo? Si Cristo realmente murió por todos, entonces ¿por qué no todos se salvan?

2. ¿Cuán importante es la relación previa cuando se trata de dar consejos o críticas a otro creyente? ¿Qué podemos aprender sobre esto por el ejemplo que dio Pablo? ¿Qué podemos aprender, que pueda ayudarnos en nuestro ministerio en favor de otros?

3. El amor y la preocupación de Pablo por los creyentes de Tesalónica es bien evidente. Este amor refleja el amor que Jesús reveló cuando estuvo en la carne. El amor es un componente poderoso para ablandar los corazones y para lograr la apertura de la gente a la gracia de Dios. ¿Cómo podemos aprender a amar a otros más de lo que ya lo hacemos? ¿Cómo podemos aprender a revelar más ese amor?

RESUMEN: En 1 Tesalonicenses 2:13 a 3:13, Pablo describe los eventos y las emociones del período entre su salida obligada de Tesalónica y el regreso de Timoteo a Corinto, con noticias acerca de esa iglesia. El énfasis central del capítulo es el profundo vínculo de Pablo con los creyentes tesalonicenses.

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