“Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre su simiente y la simiente suya; esta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar” (Génesis 3:15).
LA PELEA DE SATANÁS
Ayer viste una progresión de la revelación de Dios y de su verdad en la gran controversia. Dios obró por medio de la adoración patriarcal y la realizada en el Santuario israelita, de la muerte expiatoria de Cristo, de la iglesia, y del propio ministerio de Cristo en el Santuario celestial.
Pero Satanás trabaja sin descanso para destruir los planes de Dios. Gran parte de la controversia ha sido, y sigue siendo, sobre estos mismos problemas.
Por ejemplo, el sistema de sacrificios de los patriarcas y el del Santuario de Israel fueron diseñados por Dios para recordarnos que él es el Creador y para mantener viva la esperanza de la redención.
¿De qué manera procuró Satanás usurpar y destruir la verdad acerca del plan de salvación, especialmente como se revela en el sistema de sacrificios? Ver Romanos 1:20-28; Deuteronomio 32:17, 18.
La encarnación de Cristo, su ministerio sobre la Tierra y su muerte como sacrificio expiatorio en la cruz fueron las partes centrales del modo que Dios eligió derrotar a Satanás. La muerte de Cristo garantizó la derrota de Satanás en su lucha contra Cristo.
¿Cómo muestran los siguientes textos la forma en que Satanás trabajó contra Jesús? Mateo 2:1-18; 4:1-11; 16:21-23; 27:39-42.
Después de su muerte y resurrección, Cristo estableció su iglesia para proclamar las buenas nuevas de salvación a la humanidad perdida. Desde el comienzo, Satanás decidió debilitarla y destruirla. Los siguientes pasajes muestran algunas de las tácticas de Satanás contra la iglesia: Hechos 5:17, 18; 7:54-60; 2 Tesalonicenses 2:1-4; 1 Timoteo 4:1; 2 Pedro 2:1; Apocalipsis 12:13-17.
Entretanto, Hebreos presenta un Santuario real en el cielo, al que Cristo entró después de su ascensión ( Hebreos 4:14-16; 9:24), donde realiza funciones sacerdotales en favor de la humanidad pecadora (Hebreos 7:27). En Daniel 8:11-14, vemos la actividad de Satanás en relación con el ministerio sacerdotal de Cristo en el Santuario celestial, y su intento de usurpar ese ministerio.
Lee 1 Pedro 5:8, 9. ¿Qué advertencia da y cómo podemos vivirla cada día? ¿Cómo podemos resistir al diablo? ¿Cuán a menudo percibes los esfuerzos de Satanás en contra de ti?