"Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas" (Apocalipsis 14:6, 7).

CONCLUSIÓN

viernes 25 de enero, 2013

La Biblia es un libro que habla de Dios y de su relación con nosotros, los humanos, y con nuestro mundo. Los eventos de la semana de la creación son singulares y sobrenaturales. Están fuera de la esfera de la investigación científica por, al menos, dos razones. Primera, su singularidad. Los eventos singulares ocurren solamente una vez. La ciencia tiene dificultades al tratar con las singularidades, porque no pueden repetirlas o probarlas en circunstancias diferentes. Segunda, los eventos de la creación se produjeron sobrenaturalmente. No se originaron como resultado natural de la forma en que Dios sostiene la creación, sino que fueron especiales, actos directos de Dios. La ciencia solo estudia causas secundarias y no acepta, así como se la practica hoy, explicaciones que dependan de la acción directa de Dios. Por lo tanto, siendo que los eventos de la creación son singulares y sobrenaturales, están fuera del alcance de la ciencia.

Este punto es importante porque nuestro concepto de los orígenes tiene muchas repercusiones en la idea de la naturaleza humana y la identidad propia. Comprender nuestro origen es tan importante que Dios lo puso como el primer tema en la Biblia, y el mensaje de la Biblia está basado en la historicidad del informe de la creación. Pretender que podemos conocer la verdadera historia de nuestro mundo por medio de la ciencia es pretender que pueda ser explicada sin apelar a ninguna acción directa de Dios, un error que ha conducido a mucho errores más.

“Los hombres procurarán explicar la obra de la creación por causas naturales, que Dios nunca ha revelado. Pero la ciencia humana no puede escrutar los secretos del Dios del cielo y explicar las estupendas obras de la creación, que fueron un milagro del poder supremo, así como no pueden mostrar de qué modo llegó Dios a la existencia” (SP 1:89).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

1. La creación es un tema dominante en toda la Biblia. ¿Hay evidencias de que los escritores bíblicos tenían conceptos diferentes de la creación o que alguno de ellos tuvo dudas acerca de la veracidad del Génesis? ¿Por qué es importante esta respuesta?

2. ¿Qué razones podría tener alguien para justificar el rechazo de la idea de que la naturaleza fue diseñada?

3. Jesús ratificó la autoridad de Moisés (Lucas 16:29-31), incluyendo la historia de la creación (Marcos 2:27, 28; Mateo 19:4-6). Dado el ejemplo de Jesús, ¿cuál debe ser nuestra actitud hacia la historia de la creación?